the papaya alert:

ola de pavor en capital
se instala el alerta papaya, ciclo de fruta en las brazas.
es que la temperatura externa
no debe igualar a la temperatura corporal
esto es:
con 37 grados de sensación térmica
el cuerpo humano se estupidiza
malconduce, se inhabilita
balbucea vocablos sin refrigerar

días de verano y el calor
activa ciertos elementos químicos en el aire
el oxígeno gana peso y se densifica la textura
en consecuencia:
nos movemos en la fluctuación de gas horneado

pero el aire acondicionado irrita las fosas nasales, the nostrils
y los ventiladores de techo enruidan los tímpanos
da igual
hay personas que hacen la recorrida
ambiente por ambiente van encendiendo ventis
hélices que giran no para impulsar transporte
pero para
que las ideas retornen a su cauce lógico

es imposible pensar con este calor
naranja en las personas
alta gama, alta rabia de papaya
la del momento en el que vuelven a ser pronunciadas
las leyendas urbanas
hay inclusive afiches pegados que advierten
sobre la combustión espontánea

oda de pavor por las avenidas y se instala el código papaya
los ventis grises de la gloriosa industria nacional
mueven centímetros de sus bases aerodinámicas
esto es:
en un hangar cientos de ventiladores en función
apuntan a una zona fresca
y debajo los soportes bailan en su lugar designado

no se puede tipear con este calor
no se puede
ingresar conceptos en la book note
por lo que
las horas del día son poco productivas
uno sienta el culo en el sofá y acerca
una barra de hielo que vapoera alaska
más luego enciende el televisor y mira dvds
numerados a marcador indeleble

con este tono de color
es imposible salir afuera
no se puede reconocer a los que van de
o andan en
ya no tiene sentido fomentar la misión a marte
mordida la papaya
este ya es
el planeta rojo